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4. DISCUSION
Los resultados expuestos tienen su fundamento según (Wolter, 
2018, p. 42) que al evaluar una vaca generalmente se valora la 
disposición de la ubre tomando en cuenta la base de la ubre 
y el corvejón. La altura de la ubre de la vaca, tiene relación 
directa con el ancho de los cuartos traseros alojados entre las 
extremidades traseras, se considera un buen indicador de la 
capacidad de la vaca para producir leche, el cálculo puede 
efectuarse a dos distancias, en el nacimiento del tejido glandular 
o en la mitad de toda la longitud en dirección vertical, esta 
medición debe ser evaluada momentos antes del ordeño, la 
escala de calicación va desde 1 = estrecha; 5 = intermedio; 9 
= ancha 
 Las vacas que tienen una ubre más alta que los corvejones 
tendrán menos cantidad de lesiones en la ubre y pezones y 
generalmente se espera que sean más longevas. Manifestando 
que mientras mejor disposición de ubres presenta las vacas 
mejor será la producción de leche además al reproducirse se 
alcanzará crías más productivas, con mejores rasgos genéticos 
propios de la raza Holstein. En promedio, se ha estimado que 
sólo el 1 % de los cuartos mamarios de un hato ganadero tienen 
infecciones por bacterias Gram -, comparado con una tasa del 
35-50 % por bacterias Gram +, en un mismo lapso. 
Una ubre ideal es aquella donde la implantación está a 4 
dedos de la vulva. Las ubres traseras más altas permiten mayor 
capacidad de producción, además indica que tan arriba se sujeta 
la ubre, es la distancia entre la parte inferior de la vulva y la 
inserción de la ubre, una inserción alta nos da mayor longevidad. 
Los valores más altos son los más deseables.
En promedio, se ha estimado que sólo el 1 % de los cuartos 
mamarios de un hato ganadero tienen infecciones por bacterias 
Gram -, comparado con una tasa del 35-50 % por bacterias 
Gram +, en un mismo lapso de tiempo. Así, se ha apreciado que 
se requieren 2000- 4000 ordeños para observar una infección 
mamaria por bacterias Gram -, mientras que la frecuencia 
de infecciones por bacterias Gram + es de 1 por cada 600-800 
ordeños
Las alteraciones en la calidad de la leche están directamente 
relacionadas con la salud de los bovinos lecheros lo que es 
corroborado con las apreciaciones de (Arango, 2017, pág. 
25) quien menciona que el contenido de proteínas en la 
leche es la cantidad de nitrógeno total de la leche expresada 
convencionalmente como contenido de proteínas y determinada 
mediante procedimientos normalizados.  Se considera que 
la presencia de mastitis en las vacas reduce la producción de 
leche y altera su composición, sobre todo la caseína, la cual 
es la proteína principal de la leche, la cual disminuye y otras 
proteínas de menor valor nutricional se incrementan, por lo 
tanto, afecta la calidad de los productos lácteos como el queso, 
yogurt, requesón entre otros, (Bedolla, 2017, pág. 45).
De acuerdo a la mayoría de los trabajos, se aprecia que la 
composición de la grasa disminuye al  menos del 10 %, sin 
embargo, sí cambia ampliamente, disminuyendo la calidad de 
los productos lácteos elaborados. Si bien la cantidad total de 
ácidos grasos no cambia, aumenta la cantidad de ácidos grasos 
libres, así como disminuye la cantidad de fosfolípidos, debido a 
una reducción en el tamaño del glóbulo de grasa. La composición 
de la membrana del glóbulo graso también cambia y es, en 
promedio, un 10 % menor que la de leches no mastiticas.
Al respecto (Acuña, 2018, pág. 14), maniesta que la lactosa, 
es el componente que mas abunda  entre los sólidos presenten 
en  la  leche  y  es  el  principal  componente  que  inuye  en  la  
presión osmótica en las glándulas mamarias; varía entre 4.2 y 
5 % respecto al volumen total de la leche; siendo más baja su 
concentración al nal de la lactancia y en leches provenientes 
de cuartos con mastitis. 
Esta variabilidad de la prevalencia de mastitis subclínica 
en los diferentes hatos es el resultado de los disímiles tipos 
de manejo que se llevan a cabo en cada establo lechero. La 
disminución de la lactosa en la leche de vacas con mastitis 
subclínica puede deberse a un proceso de reducción enzimática 
de este disacárido en la glándula infectada, además de la 
reducción de la capacidad de síntesis por parte de la misma, al 
respecto  (Mera, 2017, pág. 52),  menciona que en la glándula 
inamada existe una alta concentración de cloruro de sodio, lo 
que trae como consecuencia una disminución en la síntesis de 
lactosa como mecanismo de compensación osmótica  
Al producirse una alteración en la salud de la vaca producida 
por mastitis existe un variación en el contenido de bacterias  y 
que es corroborado con lo que indica (Calderón, 2019, pág. 25), 
quien menciona que la cantidad de bacterias en el interior de 
la ubre de la vaca depende del nivel de higiene que se realice 
durante el ordeño. Se ha descrito que la prueba CMT es una 
medición del grado de infección bacteriana en la ubre, ya que el 
reactivo CMT reacciona con el ADN, de las células blancas que 
salen a combatir la infección (y que son proporcionales al grado 
de la infección. Los Staphylococcus aureus son uno de los agentes 
causales principales de mastitis bovina. 
Según  (Wolter, 2018, pág. 25), el recuento de células somáticas 
se utiliza corrientemente como una medida de calidad de la leche 
cruda, altos niveles de estas células en la leche son indicativos 
de una leche anormal, de calidad disminuida, causada por una 
infección bacteriana intramamaria. La leche que presente una 
cantidad elevada de células somáticas producto de la mastitis 
contiene un valor reducido para la industria de manufactura del 
queso, yogur y otros derivados con las consecuentes pérdidas 
económicas. Las células somáticas están constituidas por 
leucocitos (indicadores de mastitis o infección de las glándulas 
mamarias), se introducen en la leche debido a una inamación 
o lesión. La presencia de mastitis disminuye el rendimiento en la 
fabricación de quesos, inhibiendo la actividad de los fermentos 
lácticos. 
La heredabilidad de la mastitis clínica fue baja sólo un 6% de la 
variabilidad observada por la enfermedad se debe a la genética 
ya que el resto viene determinado por factores ambientales 
como el manejo la edad de la vaca el número de lactancia entre 
otras. la heredabilidad estimada para que el recuento de células 
somáticas puede ser de 0,18 y la de los caracteres morfológicos 
y de la ubre tuvieron un rango entre cero 0,16 y  0,40  el carácter 
Valle-Sánchez, K.; et al. / Reciena Num. 3, Año 2, Vol. 1 (2022): 55-60